Una mujer que se encontraba
siendo amenazad en su casa, llamó al 911
pretendiendo estar pidiendo una pizza, pero el asunto que en verdad ocurría,
era que ella necesitaba urgentemente que una patrulla llegara a su casa y
evitara que la siguieran lastimado.
Keith Weisinger es el operador de
telefonía que atendió la llamada, el cual
declaró pensar que todo se trataba de una broma, pero después pudo descifrar
que era en realidad una petición de ayuda.
“911, ¿dónde es su emergencia?”,
a lo que la mujer solo contestó diciendo su dirección, lo cual es bastante
tranquilizante, ya que con pesé a su situación tuvo la claridad para pensar en
esto. “Ok, ¿qué está pasando ahí?” contestó el operador, “Me gustaría pedir una
pizza”, en ese momento el operador pensó
que se trataba de una broma más.
Por esto el operador le aclaró
que estaba llamando al 911, “si, lo sé”, con testó la mujer tratando de hacerle
saber al operador que ella lo sabía perfectamente, pero que no podía dar tantos
detalles de lo que ocurría en verdad.
“De esta manera” la mujer
continuo, diciéndole al operario cómo quería su pizza. La insistencia de la
mujer hiso ver al operario que se trataba de algo real, contestándole, “Ok, señora, ¿está todo bien allí? ¿Tiene una
emergencia?” le preguntaba el operario, para escuchar un muy firme “Si, la
tengo”. Con esto el operario definió que se trataba de un accidente, y le preguntó
de manera muy clara si podía hablar o si no porque estaba junto a alguien que
no la dejara.
“Sí, eso es correcto. ¿Sabes
cuánto tiempo tardará?”, el operador, que ya tenía los datos necesarios,
localizó a una patrulla cercana para mandarla a la dirección.
Al revisar los registros de esa
dirección, pudo saber que se trataba de
una disputa doméstica, dejando de lado el que la llamada parecía de broma,
la pareja de esta mujer ya está detenido y se espera se le dicte una gran pena,
ya que maltrataba de manera constante a la mujer que llamó al 911, cansada de
vivir siempre lo mismo.